Actividad: Exprésate tú mismo
Veamos qué se necesita:
Usted necesitará una Biblia, marcadores, papel blanco y un cuadrado de treinta centímetros de plástico o vinilo. Si puede, consiga alguna forma de escuchar música suave como fondo.
Veamos cómo se hace:
Haga que los niños encuentren lugares tranquilos dentro de la sala.
Hablando con voz muy suave, dígales a los niños que la adoración no es sólo algo que hacemos, sino algo que sentimos muy adentro, cuando nos acercamos a Dios.
Lea Salmos 46:10 y luego pregunte a los niños por qué es tan difícil concentrarse cuando hay mucho ruido o cuando tenemos un día muy ocupado.
Invite en ese momento a que los niños pasen unos momentos quietos, pensando en Dios.
Tome los cuadrados de plástico o vinilo, hojas de papel y marcadores. Coloque el papel blanco debajo del plástico y luego invite a los niños para que dibujen diseños en el plástico, que expresen qué sienten con el poder y amor de Dios.
Mientras ellos contemplan y dibujan, ponga una suave música de fondo. Déjeles, al menos, diez minutos para dibujar y luego dígales que levanten sus diseños y digan una palabra que describa a Dios, como poderoso, amoroso y creador.
Coloque los plásticos en una gran ventana, pues se quedarán adheridos a los vidrios sin ninguna goma de pegar y serán una maravillosa expresión de adoración, del tiempo en que los niños estuvieron en tranquilidad y con Dios.